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El Inter, defensor del título de la Liga de Campeones, intentará sellar este miércoles su pase a los octavos de final ante el Twente holandés, partido importante también para el futuro en la entidad milanesa del técnico español Rafa Benítez.

Una victoria daría a los italianos el pase matemático a octavos y supondría un soplo de aire fresco en la situación de emergencia que parece vivir el Inter en las últimas semanas; mientras que la derrota dejaría en la cuerda floja a Benítez.

Tras perder el pasado fin de semana en casa del Chievo por 2-1 y después de cuatro jornadas consecutivas sin conseguir un triunfo en la Liga italiana, han saltado las alarmas en la casa 'interista' y la continuidad de Benítez comienza a ser cuestionada en los medios de comunicación italianos, que ya le buscan sustituto.

Y es que el juego Inter, marcado por las lesiones en este inicio de temporada, deja muchas dudas con respecto al nivel demostrado el pasado año.

Sin piezas clave como los argentinos Diego Milito y Walter Samuel, o el brasileño Maicon, todos ellos lesionados, la única noticia positiva para el plantel 'nerazzurro' ha sido la vuelta al trabajo del brasileño Thiago Motta.

El centrocampista se entrenó ayer con el grupo y podría estar listo para el próximo domingo en Liga frente al Parma, aunque será difícil que disponga de minutos mañana frente al Twente.

Así las cosas, Rafa Benítez, volverá a optar, casi con seguridad, por un esquema 4-2-3-1 muy similar al de la pasada jornada de Liga.

Prácticamente sin alternativas, la novedad podría ser la entrada de Marco Materazzi en el centro de la zaga desplazando al colombiano Iván Cordoba a la banda derecha en detrimento de Davide Santon, mientras que el camerunés Samuel Eto'o seguirá siendo el único referente en ataque.

La derrota en Londres frente al Tottenham (3-1) concedió al cuadro inglés el liderato del grupo A con siete puntos, los mismos que el Inter, mientras que el Twente es tercero con cinco y por tanto quiere apurar sus opciones de seguir en la Liga de Campeones y como mínimo amarrar la Liga Europa.

El cuadro holandés está dando la cara en esta edición del primer torneo continental. En la ida estuvo cerca de vencer al propio Inter y sacó un punto (2-2) y comenzó a mostrar sus intenciones de convertirse en una de las revelaciones.

El equipo que dirige el ex guardameta belga Michel Preud'homme, debutante en estas lides, confiará buena parte de sus opciones de sorpresa en el costarricense Bryan Ruiz, que acude a uno de los mejores 'escaparates' del mundo del fútbol.